Cuando se tiene el honor y la responsabilidad de firmar el preámbulo de un texto de tal trascendencia como la de éste, humildemente sólo pretendo estar a su altura, así que confío a la pluma mi sentir, respeto y admiración.

Transmitir una forma de expresión requiere elementos inteligibles que sean comparables con una misma cosa. La palabra nos permite asociar y relacionar el pensamiento unificando los criterios para comunicarnos o identificarnos como personas.

En su contexto académico la Danza se percibe como algo puramente visual y la gran olvidada es la Música. Pero sus amantes sabemos que son las dos caras de la misma moneda, formando una dualidad sincrónica de expresión que difícilmente se puede dar en las demás Artes.

El baile Clásico Español y el Flamenco es la perfecta simbiosis, auditiva y visual, conformada por una sintonía sublime de belleza, como pocas.

Desgraciadamente, muchos maestros que han resplandecido como estrellas, sólo nos han legado su recuerdo, didáctico y artístico, a través de quiénes estuvieron a su lado. Pedro Alarcón nos regala con su obra un gran avance para el estudio de estas dos disciplinas, abriendo una nueva perspectiva a la Danza, donde los coreógrafos podrán tratar a los bailarines-bailaores como percusionistas, esto es, como músicos e integrarlos en sus partituras, siendo así auténticos compositores.

Las nuevas leyes educativas están influyendo en el progreso de la Danza y en la formación de sus futuros profesionales. El presente libro de interacción Música/Danza reafirma la necesidad de poseer un profundo conocimiento musical para inmortalizar, como autor, cualquier obra adaptada al Baile Clásico Español en general y al Flamenco en particular.

El sistema musical que nos propone Pedro Alarcón, que entiendo es de obligado conocimiento, así como necesaria su puesta en práctica, atiende fundamentalmente el rigor en la transmisión Profesor/Alumno y se resume sencillamente en la lectura rítmica de una partitura musical.

Su conocimiento primero y, tras él, su dominio, garantizan a perpetuidad aquello que, hasta estas fechas, tenía un porcentaje alto de olvido y modificación, por tratarse de transmisión oral. La importancia de esta innovación me da pie para asegurar que se trata de una fecha histórica para la Danza.

Propongo que se trabajen los ejercicios que se incluyen a continuación. La técnica y perseverancia serán básicas y fundamentales pero recordemos que el Arte nada más lo transmite el alma.
Ángel Ramón Martínez García
Director del Conservatorio Superior de Danza de Alicante.
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